Ruta de los embalses
Los embalses públicos de Puerto Rico fueron construidos en regiones montañosas con el propósito de retener la máxima cantidad de agua en el menor espacio superficial posible. De esta manera, resultaron represas profundas con orillas de declives precipitados.
Estos lagos artificiales tienen una función vital para el ser humano: el almacenamiento de agua para consumo doméstico e industrial, para el riego agrícola, la producción de energía eléctrica, así como el control de inundaciones. Sin embargo, también han devenido en hábitat para especies nativas y migratorias, creándose así verdaderos refugios de vida silvestre.
Es ese un espacio ideal para la práctica de actividades recreativas, como el paseo de botes, la pesca o simplemente la meditación y el descanso.
En PR existen en total unos 37 embalses públicos, de los cuales 21 se consideran de envergadura por su capacidad y diversidad de usos.