Trujillo Alto

La “Ciudad de los Manantiales”, “Pueblo de las Ocho Calles”, “La Ciudad en el Campo” y el “Pueblo de los Arrecostaos”

Existen varias versiones con respecto al origen de este último cognomento. Se cree que proviene de cómo lucen las casas construidas en las montañas del pueblo. Las mismas están tan cercanas unas a las otras que parecen estar recostadas. Se cree, también, que puede estar relacionado con la alegada costumbre de los trujillanos de recostarse. Otra versión lo vincula con una roca en forma de vaca localizada antiguamente en el pueblo. La misma era un punto de reunión para los vecinos, los cuales se recostaban de esta mientras conversaban. Esta piedra fue removida del pueblo y colocada a orillas del Río Grande de Loíza.

Fundación

Durante el siglo XVII, la corona española otorgó a Miguel Díaz, natural de la población de Trujillo en España, un amplio hato que se extendía sobre ambas riberas del Río Grande de Loíza. Este territorio, que perteneció al cacicazgo de Cayniabón del cacique Canobaná, se conoció como Trujillo Alto y Trujillo Bajo.

Los vecinos de los barrios que hoy componen la jurisdicción de Trujillo Alto acudieron al obispo y al gobernador de Puerto Rico para solicitar permiso para construir una capilla. Las crecidas del río imposibilitaban a los vecinos viajar a Río Piedras para asistir a misa. El establecimiento de una iglesia era el primer paso adquirir la autorización para la fundación de una villa.

Los vecinos de la ribera izquierda del Río Grande de Loíza se opusieron, ya que de poblarse el lado este o la orilla derecha del río, estos tampoco podrían cruzar el río durante las crecidas para acceder al pueblo. Finalmente, vencieron los vecinos de la ribera derecha del río: el 8 de enero de 1801 quedó constituido el nuevo municipio con el nombre de Santa Cruz de Trujillo Alto.

En 1826, las comunicaciones de Trujillo Alto mejoraron notablemente, ya que se construyeron los primeros dos puentes: uno hacia Río Piedras y otro hacia Río Grande. El 13 de septiembre de 1828 el huracán San Felipe destruyó la iglesia católica del pueblo por lo cual fue reconstruida en hormigón. Tres años después, en 1831, Trujillo Alto estaba organizado en seis barrios: Carraízo, Cuevas, Quebrada Grande, Quebrada Infierno y Trujillo Alto Pueblo.

En 1844, se erigió la Casa del Rey y diez años después, se fundó la primera escuela con una matrícula de 49 alumnos. En los años siguientes, la población se redujo notablemente debido a las muertes provocadas por la epidemia de cólera del 1855.

La economía de esta región, que en los primeros años se basó, mayormente, en la cría de ganado, se enriqueció con el cultivo de la caña de azúcar y de frutos menores. En Trujillo Alto, también, se produjo: azúcar, melao, aguardiente, arroz y maíz.

En 1902, la Asamblea Legislativa de Puerto Rico aprobó la Ley para la Consolidación de Ciertos Términos Municipales que eliminó al municipio de Trujillo Alto y lo incorporó con todos sus barrios al de Carolina. En 1905, cuando una nueva ley de la Asamblea Legislativa derogó la anterior y restituyó a Trujillo Alto su carácter de municipio independiente.

En 1910, se estableció el alumbrado público a Trujillo Alto. El sistema constaba de 16 faroles de gas. Tres años después, en 1913, se cambió por el eléctrico. En el 1939, el ejército de Estados Unidos construyó el puente de acero sobre el Río Grande de Loíza para poder movilizar tropas hasta Gurabo.

Actualmente, el municipio cuenta con fábricas que elaboran: alimentos, madera, tela, metal, maquinaria eléctrica y electrónica. También se trabaja: la explotación de canteras de piedra, el cultivo de frutos menores y la ganadería. Además en este municipio existen depósitos de mármol.